La Paz, mayo de 2025 – Durante dos jornadas intensas de diálogo, propuestas y compromiso colectivo, Bolivia vivió un momento histórico en la agenda de derechos sociales. El Foro Internacional “Hacia la Construcción de Sistemas de Cuidado en Bolivia”, realizado el 21 y 22 de mayo en La Paz, reunió a más de 200 personas —entre autoridades gubernamentales, organizaciones sociales, trabajadoras del hogar, académicas y lideresas territoriales— para avanzar hacia una política nacional de cuidados con enfoque de derechos, género e interculturalidad.
El evento fue organizado por el Centro de Promoción de la Mujer Gregoria Apaza (CPMGA) y la Plataforma Nacional de Corresponsabilidad Social y Pública del Cuidado, con el respaldo de instituciones como ONU Mujeres, Organización Internacional del Trabajo (OIT), CIUDADANÍA, Alianza por la Solidaridad ActionAid, INSP!R Bolivia, entre otras.
Un tema que toca a toda la sociedad
Según datos de OXFAM, en Bolivia 4,5 millones de personas requieren cuidados. Esta cifra incluye a niñas, niños, adolescentes, personas adultas mayores, enfermas y con discapacidad. De ellas, cerca de tres millones viven en condiciones de pobreza y vulnerabilidad. Las mujeres bolivianas dedican un tiempo desproporcionado al cuidado no remunerado, lo que limita su derecho al trabajo, a la educación y a la participación social.
“Hablar de cuidados es hablar de educación, de salud, pero también del trabajo y de las trabajadoras del hogar”, expresó Paz Arancibia, Especialista Senior de Género y No Discriminación de la OIT, durante el panel inaugural dedicado al derecho al cuidado.
Por su parte, María Lucía Scuro, Oficial de Asuntos Sociales de la División de Asuntos de Género de la CEPAL, afirmó:
“América Latina está llevando una voz sumamente importante a los debates globales respecto a la agenda de cuidados. Estamos hablando de poner los cuidados en el centro del desarrollo de los países”.
Uno de los momentos más relevantes del foro fue la presentación oficial de la Política Nacional de Cuidados, a cargo de la Viceministra de Igualdad de Oportunidades, Miriam Huacani, consolidando este espacio como un puente entre el Estado y la sociedad civil.
En el panel “Cuidados y territorios”, participaron Tania Sánchez, Directora Ejecutiva de la Coordinadora de la Mujer; Flavia Marco, investigadora de la Plataforma Nacional de Cuidados; y Nidya Pesántez, Representante País de ONU Mujeres, quien afirmó: “Aquí se debate cómo construir un sistema nacional de cuidados, cómo integrarlo a la economía y cómo debe ser asumido por los Estados, las poblaciones y las personas. El cuidado es el centro de la vida”.
Cuatro mesas temáticas, una visión compartida

En el primer día del evento se desarrollaron cuatro mesas simultáneas de trabajo que abordaron los principales desafíos que enfrenta el país para construir una sociedad del cuidado:
- Territorios y sostenibilidad: se destacó la necesidad de redistribuir equitativamente las tareas de cuidado, especialmente en contextos rurales y vulnerables, integrando una mirada territorial, intercultural y ambiental.
- Trabajo decente y economía del cuidado: se visibilizó el valor económico del cuidado, con énfasis en las trabajadoras del hogar y rurales, y se demandó el cumplimiento de leyes laborales y el financiamiento de políticas públicas.
- Investigación e incidencia: se identificaron desafíos teóricos y metodológicos para producir datos pertinentes que reflejen la realidad de las mujeres cuidadoras, incorporando saberes indígenas y marcos feministas decoloniales.
- Sociedades del cuidado: se reflexionó sobre la necesidad de situar el cuidado como eje del desarrollo social y democrático, reconociéndolo como derecho humano y responsabilidad compartida entre Estado, sociedad y familia.
Según el CEDLA, las mujeres en Bolivia dedican más del doble de tiempo que los hombres al trabajo de cuidado no remunerado, lo que tiene impactos directos en su autonomía económica, su salud y su participación social.
Intercambio regional, evidencias y propuestas

El foro también fue escenario de un valioso intercambio internacional, con la participación de expertas de la OIT, CEPAL, la Internacional de Servicios Públicos (PSI) y WSM, así como representantes de plataformas de cuidado de Argentina, México, Colombia y República Dominicana.
Durante el panel sobre trabajo decente, Susana Barria, secretaria subregional para la región Andina de PSI, afirmó:
“Para lograr cambios hacia la justicia social —de género y clase— necesitamos reconstruir la organización social del cuidado. Solo con unidad sindical y alianzas sociales tendremos fuerza propositiva”.
Desde Bolivia, Magdalena Rojas, representante de FENATRAHOB, cuestionó: “¿Sin el cuidado, qué sería de la sociedad?”, visibilizando el rol crucial de las trabajadoras del hogar. También intervino Andrea Ulloa, presidenta de CAMEBOL, quien destacó la necesidad de políticas que fortalezcan la economía social y solidaria de las mujeres cuidadoras.
También se presentaron estudios e investigaciones clave que fortalecen la construcción de políticas públicas. Carla Gutiérrez, directora del CPMGA, expuso los hallazgos del estudio “Prácticas y visiones del cuidado en comunidades rurales del altiplano de La Paz”. Alexandra Arguedas, coordinadora regional de WSM, presentó “Transitar hacia la sociedad del cuidado para alcanzar la autonomía económica de las mujeres en América Latina y el Caribe”. Asimismo, participaron Fernanda Wanderley (IISEC) y Claudia Arce (CIUDADANÍA), con investigaciones sobre georreferenciación y análisis económico de servicios de cuidado.
Lo que viene: una agenda boliviana rumbo a la Conferencia Regional

El foro cerró con el compromiso de sistematizar las propuestas trabajadas en las mesas temáticas y articularlas en una agenda conjunta de incidencia para representar a Bolivia en la próxima Conferencia Regional de las Mujeres.
Las organizaciones reafirmaron su voluntad de continuar impulsando la construcción de un sistema nacional de cuidados justo, sostenible e inclusivo, donde cuidar no sea una carga invisible, sino una responsabilidad compartida y un derecho garantizado.
Desde Bolivia, se fortalece así una apuesta política y social para avanzar hacia una sociedad del cuidado que garantice igualdad, justicia y bienestar para todas y todos.